Hace ya algún tiempo escuché (tales eran sus gritos) fuera de antena a cierto profesional del periodismo rajar a gusto de Gómez, de su gestión y de su supuesta afición a las ciencias ocultas en tono bastante hiriente y "bordesico". El otro día ese mismo periodista era en su medio de comunicación el adalid del optimismo y la bienaventuranza, afirmando que el quinto proyecto de Gómez sería, sin duda, el del éxito que todos estamos esperando. De hecho llegó, incluso, a vender la cifra de 1700 abonados como si fuera un éxito rotundo...
Me pregunto qué habrá pasado en todo este tiempo para que alguien pueda variar así su forma de pensar; y, suponiendo que no haya pasado nada, lo que me pregunto es cómo se puede ser tan hipócrita para decir una cosa en público cuando en realidad se piensa otra en privado. Yo no soy periodista pero imagino que si lo eres y no te gusta lo que está pasando tienes dos opciones; ser honesto y decir lo que piensas (la más loable y a la larga la mejor) o hacerte el "longui", mirar para otro lado y limitarte a cubrir la información para no meterte en follones (criticable y desleal con los principios del periodismo...pero comprensible hasta cierto punto).
Lo que ya se me antojaría absolutamente infame es que alguien que parece no creer en el proyecto ni en quienes lo dirigen, no sólo no lo denuncie sino que encima lo aplauda y se lo venda (como el antiguo Propagandaministerium) a sus lectores/oyentes como algo muy bonito de lo cual deben sentirse orgullosos y esperar mucho. Allá cada cual.