Leo, algo decepcionado, que para Alicante sólo hay completos, por el momento, 6 autobuses. En mi propia peña, el pasado sábado, pulsé un poco cómo estaban los ánimos para el desplazamiento a Alicante y encontré que, prácticamente nadie de los más guerreros, iba a venir al Rico Pérez.
Francamente, no lo entiendo. En mi cabeza no cabe que para Elche, en su momento, a estas alturas de semana, ya estuviera garantizada una presencia masiva de cartageneros en la grada, y contra un rival más atractivo, con el que hay más rivalidad, y estando más avanzada la competición, con el Cartagena aún en puestos de ascenso, la afición no esté respondiendo como yo esperaba.
El Hércules basa buena parte de su éxito como local en el apoyo de su afición; una afición que no está nada acostumbrada al desplazamiento masivo de aficionados de otros equipos a su feudo. Una presencia numerosa de cartageneros en el Rico Pérez enrarecería bastante el ambiente contribuyendo, muchísimo, a que el Hércules se sintiera incómodo y nuestro equipo lo tuviera más fácil. Por eso no entiendo, repito, que, a día de hoy, los foros de internet no sean el hervidero que fueron en partidos como el del Elche o el Murcia, y que las noticias sobre el número de plazas que se van completando sean tan escasas. Es más, no entiendo la falta de facilidades para adquirir entradas, cerrando hoy el plazo para su retirada, en lugar de ampliarlo hasta mañana viernes. Entre las festividades, retrasos y demás, los aficionados sólo han tenido martes y jueves para animarse y apuntarse al viaje organizado por la Federación de Peñas.
La afición lleva algunas semanas dejando bastante que desear. Se empezó muy bien, se siguió fenomenalmente con el desplazamiento a Murcia y el apoyo incondicional al equipo pero, se llevan unas jornadas, en las que se echa de menos su aliento. Y en una categoría, como esta, donde los detalles inclinan la balanza hacia un lado u otro, su concurso puede ser decisivo. Si hace dejadez de sus obligaciones y deja de asistir a un desplazamiento tan fácil y cercano por cuestiones de comodidad, porque lo retransmiten por televisión, porque hace frío o porque tiene miedo, tendrá un poco menos de autoridad moral para reprocharles a los jugadores que hagan dejadez de las suyas.
Francamente, no lo entiendo. En mi cabeza no cabe que para Elche, en su momento, a estas alturas de semana, ya estuviera garantizada una presencia masiva de cartageneros en la grada, y contra un rival más atractivo, con el que hay más rivalidad, y estando más avanzada la competición, con el Cartagena aún en puestos de ascenso, la afición no esté respondiendo como yo esperaba.
El Hércules basa buena parte de su éxito como local en el apoyo de su afición; una afición que no está nada acostumbrada al desplazamiento masivo de aficionados de otros equipos a su feudo. Una presencia numerosa de cartageneros en el Rico Pérez enrarecería bastante el ambiente contribuyendo, muchísimo, a que el Hércules se sintiera incómodo y nuestro equipo lo tuviera más fácil. Por eso no entiendo, repito, que, a día de hoy, los foros de internet no sean el hervidero que fueron en partidos como el del Elche o el Murcia, y que las noticias sobre el número de plazas que se van completando sean tan escasas. Es más, no entiendo la falta de facilidades para adquirir entradas, cerrando hoy el plazo para su retirada, en lugar de ampliarlo hasta mañana viernes. Entre las festividades, retrasos y demás, los aficionados sólo han tenido martes y jueves para animarse y apuntarse al viaje organizado por la Federación de Peñas.
La afición lleva algunas semanas dejando bastante que desear. Se empezó muy bien, se siguió fenomenalmente con el desplazamiento a Murcia y el apoyo incondicional al equipo pero, se llevan unas jornadas, en las que se echa de menos su aliento. Y en una categoría, como esta, donde los detalles inclinan la balanza hacia un lado u otro, su concurso puede ser decisivo. Si hace dejadez de sus obligaciones y deja de asistir a un desplazamiento tan fácil y cercano por cuestiones de comodidad, porque lo retransmiten por televisión, porque hace frío o porque tiene miedo, tendrá un poco menos de autoridad moral para reprocharles a los jugadores que hagan dejadez de las suyas.
