A pesar de las chorradas de Julian Rubio en rueda de prensa, diciendo que su equipo había sido mejor que el Cartagena y había merecido ganar, lo cierto es que el Efesé acabó siendo muy superior a un Albacete que, eso sí, nos puso en apuros en la primera mitad.
Muy buenas sensaciones ha acabado dejando el Cartagena en el Carlos Belmonte. Sólo le ha faltado que hubiera pasado alguno de esos pases finales que Víctor ha errado en un par de ocasiones o que Toché hubiera enchufado alguna de las ocasiones que ha tenido para batir a Cabrero. Desde luego, nada que ver con la imagen del último partido en casa frente al Recre donde a los nuestros les quemaba el balón en los pies. Hoy no ha sido así y, aunque aún salimos perdedores en la mayoría de balones divididos y nos cuesta finalizar, el Efesé se ha parecido, algo más, a ese equipo que enamoraba los primeros meses de competición.
A destacar la solidez de Chus Herrero atrás, la recuperación de De Lucas para la causa y la gran actuación de Falcón, como sustituto de Longás. También la entrada de Héctor Yuste le vino bien al equipo. En definitiva, este partido ha servido para que gente que últimamente estaba regular, haya cogido confianza y esté a su máximo nivel en próximas jornadas, que es lo que todos esperamos. Y por supuesto, mi reconocimiento hacia toda la gente que se ha desplazado a Albacete. Lástima que se siga haciendo bandera del eterno complejo de nuestro pueblo hacia la ciudad "hermana" y se le siga dando protagonismo en todos los campos. La cosa aburre ya un poco.
Por cierto, a los aficionados del Efesé que hemos ido al Carlos Belmonte sin entrada nos han soplado 20 Eurazos en taquilla por ponernos en la misma zona que el resto de la gente de Cartagena que había adquirido su entrada durante la semana a 15 Euros. Quiero recordar aquí que esta misma circunstancia se produjo hace tres jornadas con la afición del Hércules desplazada a Albacete. En esa ocasión, el Hércules abonó a los aficionados desplazados a Albacete los cinco Euros de diferencia durante la semana posterior al choque. He ahí una buena oportunidad para que el Cartagena haga lo propio y demuestre que también sabe estar a la altura. Veremos a ver.
Muy buenas sensaciones ha acabado dejando el Cartagena en el Carlos Belmonte. Sólo le ha faltado que hubiera pasado alguno de esos pases finales que Víctor ha errado en un par de ocasiones o que Toché hubiera enchufado alguna de las ocasiones que ha tenido para batir a Cabrero. Desde luego, nada que ver con la imagen del último partido en casa frente al Recre donde a los nuestros les quemaba el balón en los pies. Hoy no ha sido así y, aunque aún salimos perdedores en la mayoría de balones divididos y nos cuesta finalizar, el Efesé se ha parecido, algo más, a ese equipo que enamoraba los primeros meses de competición.
A destacar la solidez de Chus Herrero atrás, la recuperación de De Lucas para la causa y la gran actuación de Falcón, como sustituto de Longás. También la entrada de Héctor Yuste le vino bien al equipo. En definitiva, este partido ha servido para que gente que últimamente estaba regular, haya cogido confianza y esté a su máximo nivel en próximas jornadas, que es lo que todos esperamos. Y por supuesto, mi reconocimiento hacia toda la gente que se ha desplazado a Albacete. Lástima que se siga haciendo bandera del eterno complejo de nuestro pueblo hacia la ciudad "hermana" y se le siga dando protagonismo en todos los campos. La cosa aburre ya un poco.
Por cierto, a los aficionados del Efesé que hemos ido al Carlos Belmonte sin entrada nos han soplado 20 Eurazos en taquilla por ponernos en la misma zona que el resto de la gente de Cartagena que había adquirido su entrada durante la semana a 15 Euros. Quiero recordar aquí que esta misma circunstancia se produjo hace tres jornadas con la afición del Hércules desplazada a Albacete. En esa ocasión, el Hércules abonó a los aficionados desplazados a Albacete los cinco Euros de diferencia durante la semana posterior al choque. He ahí una buena oportunidad para que el Cartagena haga lo propio y demuestre que también sabe estar a la altura. Veremos a ver.